Fidel Orantes
Agencia Reforma
Distrito Federal— Afortunado en la música, desafortunado en los negocios, es como Yahir podría describirse, pues cada intento por convertirse en restaurantero no le ha funcionado.
"No he sido buen empresario, esa es la cosa. Creo que estoy muy enfocado a mis cosas en el DF y andar delegando a otras personas no es algo que me ha funcionado", compartió.
Aunque no descarta lograr su objetivo en un futuro, por el momento se enfoca en su faceta de cantante.
Otros negocios que ha puesto con su familia, como una tienda de botas, tampoco han dado buenos resultados, por lo que prefiere ayudarlos con una mensualidad en efectivo.
"Yo he estado muy al pendiente de ellos, por supuesto. Pero el par de veces que hemos intentado poner un negocio, no ha funcionado. Prefiero apoyar mes con mes", mencionó.
Además de su carrera como intérprete, Yahir se preocupa por ser un buen papá, sobre todo ahora que su hijo Tristán vive con él en la Ciudad de México.
"Siempre estamos al pendiente de que haya alguien al tanto de él. Estamos tomando clases de inglés los dos", expresó.