Ana Isabel Aguayo
Agencia Reforma
Distrito Federal– Chuck Lorre nomás no puede superar a Charlie Sheen.
El creador y productor de la serie ‘Two and a Half Men’ dedicó el episodio final de la serie, de una hora de duración, a mofarse una y otra vez del actor que durante ocho temporadas fuera el protagonista de la popular serie de comedia de Warner Channel.
Al finalizar la temporada 12, con Jon Cryer y Ashton Kutcher a la cabeza del elenco, todos los personajes, desde este par hasta Evelyn (Holland Taylor) la madre de Charlie; Berta (Conchata Ferrell), el ama de llaves, y Rose (Melanie Lynskey) dieron voz a un guión creado por Lorre para traer a colación su pelea con Charlie... y su rencor y desprecio al respecto.
Lo cierto es que desde la salida de Sheen del sitcom, el rating fue en declive, y ésta, la decimosegunda temporada, estaba casi de más.
El rumor de que estaría de vuelta para el episodio final levantó las expectativas y le dio una gran audiencia al episodio titulado con toda la mala leche ‘Of Course He’ s Dead’, cuando todo indica a lo largo del capítulo (y la misma Rose lo confirma) que Charlie Harper no está muerto.
Y si bien es cierto que los personajes se burlan de sí mismos, la mayoría de los chistes sobre la serie son autocomplacientes y resultan en halagos innecesarios. Sin embargo, mencionan sin parar el gusto de Sheen por las drogas, las prostitutas, el sexo con animales y cómo nadie lo soportaba.
El colmo fue la “vanity card” del capítulo final, donde Lorre reconoce que Sheen sí estaba contemplado para el episodio, pero al final no lo hizo porque al actor no le gustó el guión.
Y es que pretendía que apareciera en la puerta de su casa, donde se autoproclamaría superior a todos, diría que era un guerrero ninja venido de Marte, en una palabra invencible, y terminaría aplastado por un piano.
Sheen deseaba un reencuentro emotivo con su hermano Alan, pero el productor no lo aceptó porque le daría la oportunidad al histrión de volver en buenos términos al “primetime” de la TV estadounidense.
¿Qué pasó con la historia del matrimonio/divorcio de Cryer y Kutcher, del niño adoptado y la fijación de Alan de seguir viviendo en la casa de Malibú?. Nada de eso se tomó en cuenta para el final de la serie con 12 años a cuestas.