Lourdes Díaz López
El Diario
Villa López— En el municipio chihuahuense de Villa López, Efrén Rodríguez Montes es un hombre que siempre se ha dedicado a las actividades del campo, y su esposa María Patricia Valdez, que siempre había sido ama de casa, viven ahora una experiencia extraordinaria: ella es alcaldesa de este municipio y él es el presidente del DIF, cargo que regularmente ocupan las mujeres.
De los 67 municipios del estado de Chihuahua, sólo en dos la Presidencia Municipal está ocupada por mujeres y el DIF por varones. Para Efrén, según dice, ha sido incómodo en lo personal, no sólo para él sino para toda la familia.
Mientras que Efrén considera que el cargo de su esposa ha sido incómodo para toda la familia, pero a final de cuentas es satisfactorio tener oportunidad de hacer algo por los demás, ella dice que su esposo la desespera con todo lo que él quiere hacer al frente del DIF y para lo que en ocasiones no hay suficiente presupuesto en el Ayuntamiento.
El hombre vestido con mezclilla, de sombrero y botas, con los 50 años en lo blanco de su cabello, alto y llenito, comenta que antes él podía contar con su esposa en la casa para todo, para labores domésticas, el cuidado de los hijos y en general para la convivencia ordinaria, y ahora es muy distinto, “siempre está ocupada con otras cosas”, ya toda la familia ha visto que es un trabajo muy sacrificado, “desde la Presidencia se pude ayudar mucho a la gente, pero se sacrifica mucho a la familia”, dice Efrén.
Al principio cuando le propusieron la candidatura a su esposa, lo hablaron ambos e incluso con los hijos y todos estuvieron de acuerdo en que aceptara, pero no visualizaron que su madre y en su caso su esposa, pasaría tanto tiempo ocupada, “nos vamos a la casa en la tarde y hasta allá llega el trabajo, como es un pueblo chico todo mundo nos va a buscar en la casa”, menciona Efrén.
En cuanto a su experiencia personal frente al DIF, le ha tocado estar en reuniones del estado, y sólo él y el presidente del DIF Saucillo son varones, pero en cuanto a lo que le corresponde hacer no le ha incomodado, al contrario dice, quedan muchas satisfacciones de ver cómo se avanza para bien en muchos casos, sobre todo cuando se ven resultados positivos en cualquier proyecto.
Comenta que en el municipio de López le toca atender especialmente casos de adultos mayores que viven en pobreza extrema, en el abandono y enfermos, para quienes se abrió un comedor público en el que se les da desayuno y comida, también se consiguió una persona que les da fisioterapia, rehabilitación, para quienes tienen problemas de movilidad, y cuando ya los ve sanos ha sido su mayor satisfacción.