AFP
2014-08-28
Kiev— Washington y sus aliados amenazaron ayer con sancionar nuevamente a Moscú ante una incursión “evidente” de fuerzas rusas en Ucrania, al tiempo que Kiev solicita por su parte una ayuda militar “de envergadura”.
“Es evidente a los ojos del mundo entero” que fuerzas rusas se encuentran en Ucrania, afirmó ayer el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien también excluyó usar la fuerza para resolver el conflicto.
“La incursión rusa que tiene lugar en la actualidad en Ucrania sólo puede producir” más sanciones contra Rusia, agregó Obama durante una conferencia de prensa.
“Rusia es responsable de la violencia en el este de Ucrania. La violencia es alentada por Rusia. Los separatistas son entrenados por Rusia. Están armados por Rusia, son financiados por Rusia”, recalcó el presidente.
Sin embargo, Obama afirmó que Estados Unidos no recurrirá al uso de la fuerza “para resolver el problema ucraniano”.
Además, anunció que recibirá a su homólogo Petro Poroshenko el 18 de setiembre en la Casa Blanca.
La jefa del gobierno alemán Angela Merkel y Obama coincidieron ayer durante una entrevista telefónica en que el comportamiento de Rusia en Ucrania “no puede quedarse sin consecuencias”, según anunció Berlín.
Kiev— Ambos “manifestaron su inquietud por las numerosas informaciones sobre la llegada de nuevos soldados rusos y de material militar” al este de Ucrania, declaró en un comunicado el portavoz del gobierno alemán, Steffen Seibert.
Merkel confirmó al presidente Obama que la situación ucraniana estará en el orden del día del Consejo Europeo del sábado en Bruselas, según su portavoz.
La canciller germana, además, advirtió que la Unión Europa discutirá la posibilidad de “nuevas sanciones” contra Moscú.
En la jornada, Ucrania pidió ayuda militar “de envergadura” tras acusar a Rusia de hacer penetrar tropas en el este del país, lo que fuera desmentido por Moscú.
Los temores de guerra abierta entre ambos países crecieron en las últimas horas, con acusaciones detalladas de parte de la OTAN, que asegura que son más de mil los soldados rusos en la zona.
El Consejo de Seguridad de la ONU se disponía a celebrar una reunión de urgencia, y la Alianza Atlántica anunció que sus embajadores se reunirán hoy viernes.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, anuló ayer su visita a Turquía y reunió de urgencia su Consejo nacional de Seguridad y Defensa ante el “deterioro rápido de la situación” por “la entrada de tropas rusas”.
“Está claro que la situación es extremadamente complicada (...) pero controlable, lo suficiente para no caer en el pánico y guardar la cabeza fría”, declaró Poroshenko al inicio de la reunión, después de anunciar consultas entre los estados mayores ucraniano y ruso ayer.
“Estamos en condiciones de defendernos” añadió. Poroshenko mencionó, sin más precisiones, que había negociaciones sobre suministro de armas y medios de reconocimiento a su país.
Al mismo tiempo, su gobierno reinstaurará el reclutamiento forzoso a partir del otoño.
El ministerio de Defensa ruso salió al paso de las acusaciones.
“La información no tiene relación con la realidad”, aseguró el portavoz del ministerio, Igor Konashenkov.
Las unidades militares que según Estados Unidos han cruzado la frontera están realizando “ejercicios tácticos propios, fuera de esa zona”.
Según las autoridades ucranianas, las “tropas rusas” en su territorio habían tomado el control de la ciudad fronteriza estratégica de Novoazovsk, ciudad costera de 11 mil habitantes a unos 100 km al sur del bastión rebelde de Donetsk. (AFP)