Agencia Reforma
2014-04-15
Distrito Federal— Los alimentos y bebidas procesadas deberán contar con una etiqueta con información nutrimental al frente de sus empaques y publicitarse en horarios específicos, de acuerdo con las nuevas disposiciones difundidas ayer en el Diario Oficial de la Federación.
En las nuevas etiquetas, los productores informarán sobre el contenido total de calorías, grasas, sales y azúcares en alimentos y bebidas por envase, y no por porción, como se hace actualmente.
Al mismo tiempo, las autoridades del sector salud determinaron parámetros nutrimentales para que en caso de que un producto cumpla con los límites de energía, sodio, grasas y azúcares, cuente con un distintivo denominado sello de calidad.
Asimismo, los anunciantes están obligados a cumplir con horarios en la difusión de botanas, bebidas saborizadas, chocolates, productos similares a chocolates y productos de confitería, tanto en televisión abierta y restringida, como en salas de exhibición cinematográfica.
Quedan exentos de restricciones aquellos alimentos y bebidas envasadas que se ajusten a los criterios nutrimentales, el agua para consumo humano, alimentos para niños de corta edad, goma de mascar sin azúcar y pastillas para el aliento sin azúcar.
Aquellos que no cumplan con los criterios nutrimentales podrán solicitar un permiso de exhibición, pero sólo se autorizará la difusión de publicidad, durante aquellos programas en los que se acredite mediante estudios de audiencia, que la misma no está compuesta por más de un 35 por ciento de personas de entre 4 y 12 años de edad.
Especialistas y organizaciones no gubernamentales cuestionaron los nuevos lineamientos para alimentos y bebidas envasadas.
La Alianza por la Salud Alimentaria reprobó las normas difundidas ayer y acusó que pueden ser un “gran riesgo para el consumidor”, por ejemplo en lo que corresponde a azúcares totales que no incluyen las añadidas por los productores.
“Se están mezclando los azúcares naturales, que tienen por origen los alimentos y que están recomendados en una dieta diaria, con los azúcares que se agregan a cualquier producto”.
“Éstos deben mostrar un máximo tolerable, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud”, difundió la red de organizaciones.
En un comunicado, alertó que rebasar esos parámetros pueden causar daños a la salud, como síndrome metabólico, obesidad y diabetes.
Érika Ochoa, directora del Departamento de Nutrición del Tecnológico de Monterrey, expuso que el etiquetado no generará ningún beneficio porque es complejo.
Lorenzo Ascona, especialista en Química de Alimentos de la Universidad La Salle, cuestionó que no se considere en las etiquetas las grasas trans, que se generan cuando se agrega hidrógeno a los aceites vegetales para conservar el producto en anaquel.
“Era una oportunidad para que en el nuevo etiquetado se lograra regular este tema, ya que hoy en día los consumidores no tienen información para decidir cuáles productos quieren o no comprar”, consideró.