Opinion

LA COLUMNA

DE LOS REPORTEROS

2014-09-22

La mañana de ayer, el director de Protección Civil, Fernando Motta Allen, acudió a varias estaciones de radio para ser entrevistado respecto de la contingencia climática que se vive en Juárez y, entre sus comentarios, dijo que el pronóstico del clima no contemplaba tormentas o lluvias fuertes para este lunes. Al mediodía, la realidad era otra, la mitad de Juárez se encontraba totalmente anegada por la lluvia que en unos cuantos minutos se precipitó sobre el centro y poniente de la ciudad.
Para entonces ya había trascendido que este funcionario no había hecho la solicitud de declaratoria de zona de desastre por las lluvias de días pasados y que ya se había pasado la oportunidad de hacerlo y, si acaso, se podría hacer una solicitud de declaratoria de emergencia.
La diferencia entre uno y otro estatus es que en la primera se puede solicitar recursos hasta para construir infraestructura para prevenir o atenuar las consecuencias de fenómenos climatológicos como los que hemos vivido los fronterizos a últimas fechas, mientras que en la de emergencia principalmente se entregan cobijas, agua y despensas, para enfrentar lo inmediato, pero no para remediar situaciones macro.
Hubo quienes desde la Presidencia Municipal dijeron que por creerse bombero y andarse tomando las fotos para el Facebook, Motta Allen no atiende lo primordial de su cargo que, entre otras cosas, contempla elaborar los expedientes para solicitar las declaratorias de zona de desastre o emergencia.
Al ser cuestionado al respecto por Los Reporteros, ya por la tarde, después de la tormenta del mediodía, el titular de Protección Civil dijo que ésta había causado mayores estragos que los fenómenos de los días previos y que ahora sí ya estaban trabajando en la solicitud para la declaratoria de desastre.

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Ante la llegada de las lluvias, el Consejo Municipal de Protección Civil instaló por la tarde una mesa de trabajo permanente en la Presidencia municipal con la finalidad de coordinar las acciones preventivas y de atención a la población que resultara damnificada.
Su primera acción fue lanzar la alerta preventiva para el suroriente de Juárez ante los pronósticos de tormenta por la noche para esa zona.
Desde esa mesa, en la que estuvieron los titulares de Protección Civil, Tránsito, Seguridad Pública, Desarrollo Social, Junta Municipal de Agua y Saneamiento y Conagua, coordinados por el secretario del Ayuntamiento, Jorge Mario Quintana Silveyra, en representación del alcalde Enrique Serrano Escobar, quien ayer atendió eventos en la ciudad de Chihuahua, se estuvieron atendiendo llamados de emergencia y se analizaron estrategias para prevenir y atender la contingencia que se vivía.

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La precipitación que se abatió sobre esta frontera trastornó la dinámica urbana. Habíamos dicho que el túnel de la 16 de septiembre había pasado la prueba al no inundarse durante las lluvias de días pasados, pues ayer las bombas del sistema hidráulico de ese paso deprimido no dieron abasto y el nivel del agua alcanzó más de dos metros al interior del mismo, de tal forma que tuvo que ser cerrado al tráfico vehicular. No aguantó un segundo examen a poco menos de un mes de que fuera abierto al tráfico de automóviles.
La molestia de los usuarios fue mayúscula porque tuvieron que hacer grandes rodeos para atravesar el Centro de la ciudad de oriente a poniente.
Otra situación que también llamó la atención es que la otra obra que entregó con muchos meses de retraso la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y que fue recibida a regañadientes hace apenas unas semanas por el Gobierno Municipal, el distribuidor vial Sanders, presentaba daños considerables en la carpeta asfáltica que fue colocado sobre el concreto de los pasos elevados. La lluvia deshizo el asfalto como si se tratara de arena, comentaron usuarios de ese puente. Además, los accesos y salidas del distribuidor vial de la Avenida Sanders se inundaron ayer y en vialidades aledañas se produjeron anegamientos que en otros años no se hacían.
En total, la Dirección de Obras Públicas había identificado hasta ayer 200 puntos inundables en toda la ciudad. Manuel Ortega Rodríguez, titular de esa dependencia, dijo que se planea construir pozos de absorción para resolver la problemática en esos sectores, y para esas obras se tiene un presupuesto de 10 millones de pesos, así como otra cantidad similar para bacheo general de las calles, una vez que pase la contingencia.

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El Gobierno Municipal constantemente está declarando que no tiene recursos para realizar obra, por lo que resulta extraño que ahora pretenda destinar recursos para obras de agua potable y alcantarillado sanitario que corresponde hacer a la Junta Municipal de Agua y Saneamiento.
Al menos así lo informó ayer el coordinador de la bancada panista en el Ayuntamiento, José Márquez Valerio, quien anunció que los integrantes de ese grupo edilicio se opondrán a esa iniciativa en la que, además, se pretende que el Municipio asigne de manera directa los recursos.
El Comité Técnico Resolutivo de Obra Pública está citado para sesionar este miércoles y en el seno de ese organismo se hará el planteamiento al que de antemano manifiestan su oposición los panistas por considerar irregular la utilización del procedimiento de excepción a la licitación pública para la contratación de  trabajos consistentes en la construcción de sistema de agua potable y alcantarillado sanitario en 11 puntos de las colonias Azteca y Electricistas.
La JMAS cobra caro el servicio de agua, por lo que le corresponde atender las necesidades que en ese sentido tenga la ciudad y el Municipio debe concentrarse en acciones que sí le corresponden, como el bacheo, tan necesario en estos días de lluvias, dijo Márquez Valerio.
Por cierto, Desarrollo Social solicitó autorización para comprar 15 mil láminas acanaladas y 19 mil rollos de plásticos, con un valor global de 3.3 millones de pesos para apoyar a ciudadanos cuyos techos de sus viviendas hayan resultado afectados con la contingencia por las lluvias.

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Los últimos días han corrido rumores de que Ricardo Hernández Cardozo fue removido de la administración de la Aduana de Ciudad Juárez, y que en su lugar fue colocado César Fragoso Acuña, a quien identifican como primo de Carlos Herrera Acuña, actual jefe de la Aduana de Palomas –Rodrigo M. Quevedo.
Pero fuentes al interior de esa dependencia federal comentaron a Los Reporteros que Hernández Cardozo continúa al frente de esta plaza fronteriza, que ayer no se encontraba en sus oficinas porque acudió a una junta a la ciudad de México.
Señalan que hay personas interesadas en que el administrador sea removido o reubicado, y constantemente manejan ese rumor.
De Fragoso Acuña dicen que ni siquiera lo ubican, por lo que es extraño que lo mencionen como sustituto de Hernández Fragoso.

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Hace unos días el secretario de Educación, Cultura y Deporte de Gobierno del Estado, aseguró que el problema de las cuotas escolares era exclusivo de Ciudad Juárez, que era un fenómeno que no existía en el resto de la entidad.
Pues las cifras de la dependencia que el encabeza, dicen lo contrario. De 30 casos denunciados a lo largo y ancho del estado, sólo 12 son de Juárez, de acuerdo con su vocera, Tania Escobedo Mingura.
Los centros educativos que investiga la Comisión Estatal de Derechos Humanos son el jardín de niños Jean Piaget, las primarias Luis Cabrera y María Covadonga, las secundarias federal 1, estatal 3016, estatal 17, Técnica 90 y Juan de la Barrera.
Hasta ahora no maestros sancionados, todos los casos están en proceso de investigación y aún no tienen un plazo determinado para dar a conocer si procedieron las quejas.

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