Sergio Sarmiento
Analista político y periodista
Acapulco.- Lo que pasa es que los del PRD sí nos dan cosas. Los del PRI se lo quedan todo. Después de las inundaciones los del PRI nos vendían las despensas y nos las daban carísimas. En cambio los del PRD sí nos han dado cosas.
Quien cuenta así su lógica electoral es una mujer que limpia y cocina en un apartamento de lujo en la zona Diamante de Acapulco. No sorprende realmente la fortaleza del PRD en el estado de Guerrero. El partido que gobierna el estado desde hace dos sexenios mantiene una lógica asistencialista, al igual que el PRI, pero con representantes que parecen menos corruptos. Por otra parte, varias personas me dicen que el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero, primero priista y después perredista, sigue teniendo una buena aceptación entre la gente a pesar del encarcelamiento por corrupción de parientes y ex funcionarios.
La fuerza del PRI está presente en el voto corporativo. A pesar de que no ha empezado la campaña, ya hay taxis con calcomanías de apoyo a Héctor Astudillo, el candidato priista al gobierno. La tradición del voto corporativo sigue pesando mucho. El sufragio de los sindicatos es para el PRI. Pero Astudillo ya ha sido candidato y se le identifica con la vieja clase política. Ésa es su debilidad.
El PRD tiene una candidata joven y atractiva. Beatriz Mojica fue secretaria de Desarrollo Social con Aguirre. Le tocaba dar esas despensas, esos apoyos, que la gente agradece. Mojica, quien acaba de cumplir 42 años el 25 de febrero, ha sido activista desde muy joven y forma parte del PRD desde su fundación. Tiene una imagen limpia. Cuenta con un sólido apoyo de los Chuchos, esa Nueva Izquierda que poco a poco se está quedando con el PRD, pero no sabemos qué tanto puedan debilitarla Morena y la separación del PRD de Sofío Ramírez, quien contendió con ella por la candidatura.
El PAN no tiene presencia importante en Guerrero por lo que no se espera que sea factor en la batalla electoral; Jorge Camacho es su candidato. Morena es una incógnita hasta el momento. Los hechos de Iguala han marcado profundamente al estado y es posible que muchos electores busquen una opción distinta dentro de la izquierda. Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, el candidato de Morena, tiene una larga trayectoria personal y familiar en la izquierda. Luis Walton, el ex presidente municipal de Acapulco, ha sido postulado por Movimiento Ciudadano.
El movimiento de Ayotzinapa busca impedir las elecciones. Aprovecha el desencanto de muchos guerrerenses con los partidos. Sabe, sin embargo, que no cuenta con el apoyo masivo de los ciudadanos para un boicot por lo que pretende bloquear las elecciones. Quizá tenga la fuerza de hacerlo en algunos lugares, pero no en todo el estado. Al “clausurar” oficinas del INE, sin embargo, el movimiento ha impedido que muchos guerrerenses obtengan credenciales de elector. Con esto, paradójicamente, apoya al PRI, que tiene un voto corporativo y cuyos simpatizantes tienen sus credenciales desde hace años.
Quienquiera que gane las elecciones del 7 de junio seguirá enfrentando problemas serios. Guerrero es un estado bronco en las mejores circunstancias, pero hoy Ayotzinapa y la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero están en son de guerra. Buscan enfrentar no sólo al régimen federal priista, y revocar la reforma educativa, sino imponerle reglas a cualquier gobernador.
La batalla electoral se va a definir, me parece, entre el PRI y el PRD. Lo importante no serán las políticas públicas que se propongan sino los regalos de campaña y el voto corporativo. Esto me ratifica que Guerrero seguirá siendo pobre sin importar quién sea el próximo gobernador. Ningún estado, ningún país, ha salido de la pobreza con regalos de los políticos.
Cansado
Al final Jesús Murillo Karam deja la PGR porque estaba cansado. Al designarlo como titular de la Sedatu el presidente recalca que lo respeta y le agradece su trabajo. Para Arely Gómez, la nueva procuradora, el reto es enorme.
Twitter: @SergioSarmiento